Un viaje desde el atardecer hacia el anochecer cobija este rodaje de Sesión Inmortal, donde Natalia expande su legado poético y sonoro a los espinos, aromos, pimientos y eucaliptos que rodean el Auditorio Pablo Neruda en la parte sur del Cerro San Cristóbal. En un escenario de adoquín y roca, junto al eclipse solar transcurrido hace pocas horas como testigo, Contesse se camufla con el viento que junto a su pelo acariciaron los claveles multicolores que decoran el altar conectado a sus pies.
Compositora, investigadora cultural y cantautora que encarna el folclore en su canto y la fusión latinoamericana en su instrumentación. En el imaginario que desarrolla en la poética de sus letras, se conecta con la raíz, el agua, la semilla, el bosque nativo, la muerte. Su música transmite la comprensión de la esencia de la transformación y entiende a la naturaleza como maestra de los ciclos.
Su trayectoria está impregnada de las enseñanzas de maestras como Margot Loyola, articulando la música como una proyección de la tradición hecha décimas, tonadas, cuecas, refalosas y refranes. Como gestora cultural, junto con enriquecer el lenguaje de la música popular, activa proyectos como “Agua” que busca la concientización de este derecho en un taller de canto, o también “La carpa de los oficios”, que es un espacio para la convivencia de las artes itinerantes.
En lo musical, cuenta con tres discos de estudio, donde manifiesta una clara evolución sonora que parte desde la tradición, avanzando por la experimentación, la fusión con la música contemporánea y la inclusión de elementos progresivos y psicodélicos con los que propone una reinvención del folclor mediante un lenguaje propio que la tiene posicionada entre las artistas más importantes de Chile en los últimos 20 años.