Weichafe se va de Chile, el Guerrero parte a buscar nuevos horizontes a tierras mexicanas y la despedida estuvo a la altura de su trayectoria y espíritu: una “kermesse familiar” con música en vivo y ambiente familiar que quedó casi como marca registrada para que la repitan en el tiempo y se consolide, quizás, como un nuevo festival criollo.
Estuvimos presentes en la segunda jornada del Arena Recoleta, conversando con un Angelo Pierattini menos radical en su pensamiento, pero sin dejar de ser crítico, ávido de descubrir nuevas experiencias y con sus pies muy bien puestos sobre la tierra para esta nueva etapa que comenzarán.

¿De dónde viene el concepto de “kermesse familiar”?
Nos han preguntado harto. Mira, podríamos haber hecho un teatro, era una posibilidad cierta, pero eso nos desvincula mucho del público, como que queda todo concentrado en la tocata y nosotros queríamos un encuentro con ellos, porque así es nuestra relación, súper directa. Hacer una completada, tener piscolas, este lugar es el único en Santiago que nos permitía hacerlo.
Tiene que ver con eso, con que queríamos, por ejemplo, ir a firmar discos y sacarnos fotos. Estos lugares nos permiten eso, los teatros son demasiado formales. Quizás para otras circunstancias como un lanzamiento de disco, pero esta instancia era tan personal, familiar y tan única en la vida que era súper necesario hacerlo así.
¿Te imaginaste alguna vez un concierto de Weichafe en una onda familiar como esta?
Es que los chascones que antes eran jóvenes hoy están más viejos, además se han sumado hartos adolescentes a la familia weichafera. Pero uno como que no piensa en eso, uno toca no más, haces discos, proyectas ciertas cosas, pero no te imaginas para dónde va.

Eso es lo bonito de esto, hay un camino que se va trazando y también uno se va descubriendo, el cómo se relaciona con ese camino, qué se quiere entregar, qué no. Cuando uno piensa mucho las cosas nunca es el 100%, es un 50% y el resto va apareciendo.
Uno tiene que aprender que con el tiempo, esas son las cosas que le dan el valor a los procesos.
¿Por qué hacer este segundo día con artistas tan distintos musicalmente a Weichafe como CAF y Nano Stern?

Por lo mismo, somos músicos que nos admiramos mutuamente, tenemos una relación extra escenario y hay una admiración también en la música que hacemos, cada uno, nos gusta lo que hacemos entre todos.
¿Por eso pedirle a Nano que venga sólo con guitarra y no con un formato más completo?

Si, exacto, es que para nosotros es importante que nuestro público se asocie a ese eclecticismo, siempre apelamos a eso, toda la vida hemos tocado con bandas de otros estilos.
No nos interesa tener un público true ni súper conservador, porque aparte nuestros discos, dentro del rock que hacemos, tienen una gama de sonoridades y eso lo hacemos explícito invitando otros amigos que hacen otro tipo de música, para hablarle a la gente que las problemáticas, los espacios son súper parecidos.
Weichafe a México, el país cínico y los Premios Pulsar.
Las razones de Weichafe para irse a México no son al azar, saben que allá el mercado es más grande y las posibilidades de expandir su carrera son mayores, aunque Ángelo no esconde el resentimiento que la escena del rock en Chile tiene con los medios de comunicación y la falta de espacios.

Cuéntame las expectativas que tienen con México.
Nos vamos a radicar, sólo eso ya es un éxito absoluto. Tenemos harto tiempo, nos dimos un par de años para insertarnos en el circuito, hacerlo desde abajo. Como que, a pesar tener una red de contactos bien interesante, queremos vivir la experiencia de cero. Creemos que es súper necesario para lograr el objetivo de meternos en el circuito de rock mexicano, tocar en festivales, entonces para eso se necesita un plazo.
Se van con un currículum nutrido…
Nuestro dossier dice harto, pero tenemos que encontrar las instancias para mostrar el show en vivo, que es nuestra mejor arma.
Imagino que van a mantener una relación con Chile ¿Cómo será eso desde allá?
A todas las personas que quieran hacer shows con nosotros acá en Chile, vamos a estar disponibles para viajar de vuelta, aunque queremos hacerlo más por temporadas cortas.
¿Qué falta en la escena nacional que los hace tomar la decisión de irse a radicar a México?
Nosotros, particularmente, nos vamos para abrir más camino y conectar con más gente, creemos que el rock es un estilo que está súper arrinconado en Chile, todavía. Por las cosas que dice, tanto en la lírica como en el sonido “bájale a la guitarra, a la distorsión” u “oye es muy duro lo que estás diciendo”, como que Chile todavía es un país muy cínico para la actitud de rock, porque tiene que ver con una actitud, porque hay muchas bandas que son un poco censuradas si tienen un discurso un poco más allá.
Pero eso pasa con la música que hacemos, se cierran puertas de difusión porque la guitarra está un poquito más subida de volumen.

¿Qué sensación te quedó después de los Premios Pulsar esta semana? ¿qué te parece el triunfo de Kuervos del Sur en la categoría que ustedes estaban nominados?
Sí, me parece que está bien. Su disco lo he escuchado dos veces, me parece que va en la línea de lo que ellos hacen. Es una continuación del primer disco, suena un poco mejor, obviamente, porque han pasado hartos años, pero me parece que ellos cultivan un estilo que está súper claro… quizás ahora este disco tiene unos tintes más progresivos.
Yo, particularmente como que esperaba que hicieran algo como del primer disco, donde los mejores aciertos que tienen son los vinculados a la música folklórica más popular, melódicamente, más que a la cuestión de la notoriedad de los músicos ¿cachai? Pero bueno, las decisiones artísticas son personales y bien, creo que pasaron por un buen momento el año pasado, me parece bien.

¿Y sobre los premios en si? ¿Sobre este tipo de instancias?
Me parece que hacernos un cariño está súper bien. Lo que sí, me importan mucho más las condiciones laborales de los músicos, weón… Ahora, no voy a decir que se condicione un premio.
Antes era más radical y decía que no podía existir un premio si no hay condiciones laborales básicas para un circuito musical, pero ahora digo bueno, regalémonos un cariñito, un “weon lo estay haciendo bien”, pero creo que hay una preocupación profunda en que tenemos que mejorar la estructura profesional, profesionalizar más el trabajo de la música en Chile.
Buen viaje al Guerrero, les deseamos éxito en esta nueva aventura y esperamos que su incursión sirva para que en el futuro haya más espacios para la exportación de rock local a México.
Revisa las fotos de esta nota en mejor resolución en la galería que publicamos en nuestro Facebook: